jueves, 8 de junio de 2017




PREMIOS HASSELBLAD



GRACIELA ITURBIDE


“…A lo mejor carezco del ojo de lince del que habla Cartier-Bresson, soy más reposada, me quedo con lo que está allí, estático.”


Es una fotógrafa mexicana nacida en 1942, estudio en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la UNAM.

Obtuvo el premio Hasselblad en el 2008. Mirando sus fotografías considero que su forma es muy natural, pero al mismo tiempo hay mucha fuerza en sus fotografías, también maneja muy bien la monocromía en ellas, al grado que hay mucho equilibrio entre luces y sombras; me agrada que muchas de sus fotografías las toma en un ambiente natural, no solo me refiero al de la naturaleza como tal, sino que no son de un estudio, se nota esa naturalidad de los muchos personajes que aparecen en sus fotos, es decir, que pertenecen al ambiente donde se encuentra posiblemente un fuera de foco o una profundidad de campo, creo que hasta la más “posada” es natural.

Y también en algunas de ellas logro captar fotografías donde moran muchos elementos, pero ella logra cautivar  y documentar en estas composiciones lo deseado a pesar de ello. Pude ser “sencilla” o “extravagante” y de cualquier forma cautiva, por lo menos a mí eso me transmitió. También me agrada esa manera de captar de espaldas a las personas, creo que en eso me identifico un poco quizá, pues a veces suelo también tomar fotografías cuando la gente está de espaldas.

También logro ver que en algunas fotos, deja ver elementos que quizá hoy algunos le daríamos crop, pero ella los deja y vaya que funcionan. Tolerante al tiempo, meditativa y humanista quizá.

Y termino con una frase que me gusto de ella:


"La fotografía no es la verdad, el fotógrafo interpreta la realidad y, sobre todo, construye una realidad propia, de acuerdo a sus conocimientos o emociones... ...Sin la cámara, ves el mundo de una manera, y con la cámara, de otra; por esta ventana, estás componiendo, incluso soñando con esta realidad, como si a través de la cámara se estuviera sintetizando lo que tú eres y has aprendido del lugar. Entonces haces tu propia imagen, estás interpretando"



jueves, 27 de abril de 2017





PROYECTO DE FOTOGRAFÍA



VIDA SENCILLA, PENSAMIENTO ELEVADO


 “Aquel que quiere ser libre, que quiere liberarse, debe, primero que todo aprender que no es este cuerpo material”
Bhaktivedanta Swami Prabhupada


La forma de vida y las costumbres son muy diversos y variados en todas las culturas, de modo que a través de ello las comunidades que las conforman tienen ciertos “estilos de vida”, que incluyen desde su vestimenta, sus ceremonias, fiestas, comida, ideología, prácticas, filosofía, valores etc, que los identifican , los complementan y los diferencian.

En este proyecto, mi interés es específicamente por retratar la forma de vida y costumbres de los practicantes de la cultura vaisnava o vaisnavismo (Aquel que dedica toda su vida a Visnu, Krisna, el Señor Supremo o a cualquier otra forma de la Suprema Personalidad de Dios), mostrar las costumbres que tienen, algunos festivales como el Holi “ festival de colores”, la preparación de sus alimentos (Prasad, que es comida ofrecida a la Suprema Personalidad de Dios, Krisna), ceremonias de fuego; también saber  el significado de sus vestimentas como el sari, o los dotis y de ciertos signos como el Tilaka (significa que el cuerpo es un templo de Dios y representan los pies de loto del Señor Visnu) que ponen en su frente o el bindi que usan las mujeres.



La religión vaishnava surgió en la tierra hace aproximadamente 5000 años, fecha en la cual el Señor Krishna apareció en un lugar del distrito de Mathura (cerca a Nueva Delhi), conocido como Vrindavan Dham. Desde ese entonces y hasta ahora, los habitantes de este lugar han guardado culto al Señor Krisna, quien es la representación personal de Dios.

El vaishnavismo es una tradición ancestral, espiritual y religiosa de la India. Sus bases son monoteístas y comprende la religión más practicada y aceptada dentro del hinduismo.
El vaishnavismo en India atraviesa prácticamente todos los ámbitos y actividades de la población dando resultados de una calidad exquisita en el arte, la danza, la música, la filosofía, la arquitectura, la ciencia, la medicina, etc.

Otro criterio importante para la clasificación y el análisis del vaishnavismo es la diferencia entre las corrientes religiosas impersonalistas y las personalistas. El impersonalismo se refiere a tener una concepción de Dios como espíritu, luz o energía (sin forma); ejemplo de estas corrientes filosóficas son el budismo, el taoísmo y el confucionismo, entre otras.

Las religiones personalistas se refieren a Dios como una persona con forma, atributos, nombres, cualidades y actividades específicas; el vaisnavismo es un ejemplo y presenta esta concepción como la conclusión del desarrollo espiritual de cualquier sistema religioso.

Pero también adentrándonos más, conocer su filosofía, la cual está basada en los vedas (que en sánscrito significa conocimiento), que son escrituras sagradas milenarias de la India; no son ni panteístas ni politeístas como algunos lo han pretendido presentar. Estas escrituras nos hablan de un Dios, supremo y personal, quien tiene muchos nombres, de los cuales, Krisna y Govinda son los más conocidos.



Así mismo conocer su forma de vida que está basada en principios regulativos y en el conocimiento de estas escrituras,  y la realización de diversas actividades como el yoga y el canto de mantras, por ejemplo el Maha (gran) Mantra (liberación de la mente) Hare Krisna, que cantan en las diversas ceremonias y fiestas y en la japa (repetición de mantras a través de cuentas, como un rosario).

El Maha Mantra es: Hare Krisna Hare Krisna, Krisna Krisna, Hare Hare, Hare Rama Hare Rama, Rama Rama, Hare Hare. El canto es un llamado al Señor y a Su Energía Espiritual para que le brinde protección al alma.

La palabra Hare es la forma de dirigirse a la energía Espiritual del Señor y las palabras Krishna y Rama son formas de dirigirse al propio Señor; el nombre de Krisna significa “El Supremo Atractivo” y Rama significa “El placer Supremo”. Por lo tanto, el Maha Mantra Hare Krisna significa:

¡ Oh! Mi Señor supremamente atractivo, fuente de todo placer. ¡Oh! Energía espiritual del Señor; por favor ocúpame en tu servicio con devoción.







jueves, 6 de abril de 2017




Ensayo sobre “Después de la fotografía” de Fred Ritchin

“No es que la fotografía “nunca mienta”, sino que de alguna manera siempre lo hace”

Por Monserrat Dafne Avila Cosio



La fotografía como medio digital, un tema que hoy es caótico por todo lo que implica, considerando una serie de preguntas sin fin, ¿se plasma una realidad?, ¿la fotografía digital es menos seria que la fotografía análoga?, ¿qué pasará con la fotografía en unos 20 años o menos?, ¿qué papel juega la fotografía digital?, ¿de qué maneras es utilizada la fotografía?, tales nos llevan a mirar hoy la fotografía sumergida en la era digital.


Los medios digitales son un arma de dos filos, nos pueden alejar de una realidad al grado de mantenernos como “zombies” o nos pueden fungir como una herramienta para un uso efectivo y positivo, pero digamos que hoy en día estos medios muchas veces nos han alejado de tener una plática con alguien sentado a nuestro lado , porque estamos checando las últimas publicaciones en facebook; nos han limitado a investigar, conocer libros, explorar lugares porque con wikipedia y google “toda” la información la tenemos a la mano o contemplar un magnífico paisaje sin tener la urgencia de fotografiarlo para subirlo a las redes sociales ¡ah! y posiblemente antes de eso darle unos retoquesillos en Photoshop o instragram, de este último tema trataré …la fotografía.

La fotografía análoga, aquella que se siente, se piensa y se contempla ha quedado de lado con la llegada de la fotografía digital, aquella que corre para no ser alcanzada, que tiene miles de caras, que es engañosa, fácil pero también creativa y eficaz. Con esto no pretendo estar a favor de alguna, simplemente “soltar” lo que pienso acerca de ambas en breves palabras.

La fotografía digital es un medio que ha alcanzado los lugares más recónditos y ha sido utilizada para distintas finalidades, desde una “selfie” hasta documentar una guerra del otro lado del mundo, tiene sus pros y sus contras. Pensar que puedes tomar una cámara réflex (no necesariamente réflex) y disparar mil veces en un día (exageradamente) obteniendo una gran variedad de fotografías y poder revisarlas al instante, es muy atractivo, lo que no me parece tan maravilloso es no poder memorizar a veces, o no recordar lo que había fuera del cuadro de la cámara, porque al tener la oportunidad de poder tomar las fotografías de manera “incontrolable”, piensas que la vida se te escapa y por lo tanto muchas veces no se hace esa reflexión, no se toma el tiempo necesario e incluso no te identificas de manera más sutil con lo fotografiado sino que  solo un click y ya está y con un golpe de suerte , quizá sea una fotografía magnifica, pero la fotografía  ¿y la realidad como tal? .

Esta identificación con la imagen me hace recordar el coleccionismo de la fotografía, uno de los puntos que toca Sontag en su libro “Sobre la fotografía” y pienso el por qué coleccionamos o acumulamos imágenes , posiblemente por fanatismo, por tener “recuerdos”, para dar a conocer a nuestros antepasados,como talismán; pero y que tal si también ese coleccionismo es un síntoma de una enfermedad social, me refiero a que ahora en lugar de admirar, experimentar y relacionarnos con lo real, ya sea un árbol, cables enmarañados, personas etc, nos relacionamos con lo que vemos a diario en las imágenes. Estamos tan acostumbrados ya a voltear y ver una imagen que llama nuestra atención que pasamos desapercibidos otras situaciones, paisajes o personas.

La fotografía ahora es utilizada en todas partes, por las diferentes ciencias, la publicidad, por personas profesionales y no profesionales pero ¿qué impacto tiene ésta ahora, el mismo que cuando salió la primer cámara?, yo creo que no, la fotografía ahora más que nunca navega en una inmensa barca donde todo mundo puede subirse y hacer lo que desee, es por ello que muchos ahora nos preguntamos si la imagen que estamos viendo  habrá sido alterada y como dice Griffith “el verdadero problema con lo digital es que ya no existe razón alguna para creer en las fotografías…”,¿ será verdad?, yo creo es un poquito exagerado, más bien creo que al emerger cada vez más software, programas y esas cosas tecnológicas y tener más accesibilidad  se ha hecho más fácil modificar fotografías y en algunos casos usarlos para beneficio ya sea de una persona o un gobierno , pero también encontrarnos con diversos caminos en cuanto a ella, a lo que Ritchin menciona, la fotografía hipertextual, bueno para ser sincera jamás había escuchado ese término.

Una forma más dinámica de conocer la fotografía en las redes, es el hipertexto que permite, a mi punto de vista, que el espectador interactúe y se informe más sobre una imagen, que indague más y no especule con sólo mirar la parte visual,  pero el hecho de que tengamos más información y podamos interactuar más no significa que todo sea fidedigno, he ahí la disyuntiva, aunque se han creado diversos programas que se mencionan en el libro de Ritchin, para que los espectadores a parte de informarse de la imagen, puedan establecer una especie de conversaciones, críticas y hasta posibles soluciones o propuestas para resolver un problema y no solo que éstos sientan que es su voyerismo el que actúa.

Muchos temas implican hoy la fotografía, el hecho de que cualquier persona pueda utilizar una fotografía, implica temas como el de seguridad y privacidad de lo fotografiado y temas más delicados como la pornografía. Para algunos la fotografía tiene un impacto negativo en la sociedad, para otros positivo y otros más son neutrales ante este hecho como yo, creo que esa negatividad radica en que la sociedad se ve bombardeada por una serie de imágenes de diversos temas , las cuales terminan, o preparándolas para algo, o acostumbrándola a todo tipo de temas( por ejemplo, fotografías de guerra que hoy a muchas personas ya no conmueven o ya pasan a otra imagen como si ésta fuera algo “normal”), sobretodo, aquellos temas relacionados con la satisfacción de los sentidos, el consumismo, el sexo, la comida, la diversión etc. Hay un ejemplo en el libro que habla de un fotógrafo que movió el cuerpo de un soldado de una de las guerras que menciona el texto, debido a que el sitio no era el adecuado para la fotografía , entonces lo coloca en otro; me dió una especie de “patatus” al instante, pues recordé cuando se menciona que la fotografía también se aprovecha y hace del dolor algo gráfico, una especie de turismo de la violencia, pero también puede ser un medio de reflexión, de investigación, de conocimiento de algo que sin una fotografía ya sea modificada o no, uno no se habría puesto a investigar, digo creo que también la fotografía tiene su lado positivo, el de informar, el de expresar y experimentar y porque no el de resolver. Considero importante también que la fotografía tiene un peso moral, pues si se toma una fotografía, uno tiene que contemplar (en el caso de que sea fotografía social o documental o cualquiera que tenga que darse una explicación más a fondo), si se puede realizar algo para resolver la situación o por lo menos para concientizar sobre el hecho.

 Y ahora también la llamada “fotografía del futuro” o ¿será la fotografía del shock?, aquellas que nos prepara para algo que emergerá y tendrá un gran impacto en una sociedad. Aquella que nos vigilará y nos delatara, aquella que reemplazara nuestra memoria, que nos abrirá puertas a mundos que creíamos lejanos o fantásticos o que nos convertirá en una especie de posthumanos como dice Ritchin.

Finalmente creo que el desarrollo de los medios digitales y sus consecuencias están en la forma que los utilizamos y los consumimos, la tecnología seguirá avanzando y hay de nosotros que dejemos que arrebace sus límites, pues ahora las guerras son precisamente tecnológicas, los niños se acostumbran a las peleas y guerras con sus videojuegos y luego al ver una fotografía de un genocidio, no les causa más que una especie de sorpresa de unos cinco segundos ;  por lo tanto la fotografía seguirá evolucionando al paso que queramos que lo haga y esto será inevitable, pero si estamos informados e informamos a otros, si siguen existiendo verdaderos fotógrafos que quieran mostrar una “realidad” más apegada a la realidad con verdaderas justificaciones posiblemente se puede hacer que de alguna manera no mienta.

La fotografía por lo tanto para mi es una especie de ventana donde puedes asomarte y ver un fragmento de la realidad que puede estar a miles de kilómetros o simplemente frente a ti, que hace reflexionar ante determinados hechos, especular, experimentar, investigar, informar, delatar,  pero que también a veces es frívola, atacante y usurpadora.





miércoles, 29 de marzo de 2017




EL PAISAJE


“ La fotografía de paisajes es la prueba suprema del fotógrafo, y a menudo, la decepción suprema”

Ansel Adams


El paisaje, un entorno, un lugar, un hábitat, un horizonte, una perspectiva…Casi siempre cuando uno habla de paisaje, inmediatamente la mente nos lleva a ese lugar con vegetación, posiblemente una cascada o río, aire fresco, flores, algo así como las fotos tan hermosamente expuestas de Ansel Adams, el equilibrio que conlleva entre diafragma, exposición y sensibilidad; me encontré de un de repente mirando sus fotografías durante un largo tiempo , haciendo que la profundidad de campo me llevase más allá de la misma imagen, sus contrastes y luz tan bien manejados no hacen pensar a uno en el color del paisaje, sino en el mero deseo de querer estar ahí, una fotografía casi “real” y “perfecta”, para mi hermosa pero no atrevida o desafiante.

Pero porque no, un paisaje también puede ser algo tan común y tan sencillo y maravillosamente pequeño que no muchas veces tomamos en cuenta pero que ahí está a diario y que Edward Weston encuentra esa hermosura en la sencillez de una forma y menciona una frase “hacer de lo habitual, lo inusual”, pensemos en su enfoque y nitidez brillantes que podemos notar en su hoja de col donde pueden percibirse a la perfección las venas que nacen de ella y que incluso podría parecer una tela “artísticamente” acomodada o su famoso pimiento que parece formas humanas, gracias también a las luces que supo manejar. Lo cual me recordó a Bill Brandt cuando dijo con respecto a la fotografía “Esto no es un deporte, no tiene reglas, debes intentarlo todo” y creo que es cierto pero arriesgado, arriesgado a que intentes e intentes y no más no te salga algo o que lo pruebes y de todas maneras dentro de esas pruebas experimentas y aprendes. Su fotografía me recuerda un poco a Weston en cuanto  a esa búsqueda de las formas, sólo que Bill, inversamente buscaba también ese paisaje en la figura humana, brindándonos primeros planos, contrastes de blancos y negros, profundidades de campo y desenfoques que aportan a mi ver esa extrañeza y misterio a sus fotografías.

De repente di un salto extremo cuando me encontré con Franco Fontana, al principio fue como el dicho “me saco de mis casillas”, fue un terremoto (exageradamente) del confort que sentí al mirar la fotografía  Anseliana y Westonliana, como cuando te dan tu helado de otro sabor, pero lo pruebas y al final te gusta, esos colores saturados en sus paisajes urbanos y rurales, la composición, el manejo del color, perspectivas y paisajes geometrizados, que la verdad a simple vista me parecieron algo pictóricas o gráficas, pero con ese atrevimiento y desafío que rompieron con lo bello y convencional, que muestra la “realidad”, a comparación de las dos realezas que mencioné arriba; pues estos paisajes, de Fontana, difieren,  en los rurales hay un contraste en el color, claramente juega con la perspectiva y contienen mucha expresividad, pero los paisajes urbanos contienen solo sombras de la humanidad, cierto simbolismo en ello que inquieta e interroga; me hicieron descubrir cuan se puede experimentar con la fotografía, donde podemos romper reglas o simplemente anular la “naturalidad” del paisaje.
El paisaje de Jem Southam me es un poco nostálgico, quizá por la sutileza de los colores, el paisaje nublado y sobrio, pero también es espiritual y sencillo, lo que me es agradable, me transmite cierto misticismo, como si parte fuese real pero al mismo tiempo un poco fantástico y la interacción que existe entre ser humano y su medio ambiente, ya sea un ambiente rural o más urbanizado como las fotografías de Joel Meyerowitz, que es un buen ejemplo para usar un contraste con Southam, pues este paisaje es más “metropolitano”, más caótico, rebelde y divertido, el color comunica y la profundidad de campo le da fuerza y actitud.

Para finalizar, creo que la fotografía de paisaje, ya sea desde una cebolla hasta una gran ciudad, tiene su fascinación y su dificultad, el tiempo de espera, la profundidad de campo, la luz, contrastes, obturación, exposición, sensibilidad, pero sobretodo la relación que tienes con este paisaje y el modo de percibirlo, pues por ejemplo no podría concebir a Adams haciendo un trabajo como el de Fontana, posiblemente también el lugar, tiempo y circunstancia influyan


viernes, 10 de marzo de 2017





ENSAYO
FOTOGRAFÍA...    EL RETRATO


“Cuando he tenido tales hombres frente a mi cámara, toda mi alma se ha dirigido al deber de registrar fielmente su grandeza interior así como los rasgos externos”
Julia Margaret Cameron



Cuando se habla de un retrato, me imagino siempre una escena planeada con completa alevosía y ventaja, pero sucede que un retrato, ¡claro!, puede ser de tal manera, pero también de una manera más libre, sin que de por medio se tenga que decir al modelo que por favor se siente y ponga una pierna encima de otra, que tome las flores que están a su lado o que simplemente torne una sonrisa falsa.

El retrato abarca una infinidad de maneras de hacerlo y “deshacerlo”(lo cual apenas entendí o quizá creí entendí), con deshacerlo me refiero a saber las reglas para poder romperlas, como en el caso de Julia Margaret Cameron, en los que sus retratos  fueron criticados por que  “no les llenaba el ojo” su técnica, pero al ver el retrato que hace de  Annie Wilhelmina Philpot o “La Madonna Riposata”, puedes casi ver que las modelos tienen cierto temperamento que las caracteriza, nada actuado , ni impuesto, una suerte de “interiorización” en sus rostros.

En la fotografía de Julia Margaret Cameron pude observar a parte de cierto desenfoque y nitidez no perfectos, algunas tomas de cuerpo completo, el manejo de las luces y que acerca mucho su cámara a sus modelos como si quisiera captar la sutileza que guardan sus cuerpos, sus gestos y expresiones, algo más allá de una característica o de un temperamento. Seguramente los modelos algunas veces se retorcían por dentro, pues los tiempos de exposición de Cameron eran “larguitos”, en fin, utilizaba el desenfoque, lo cual muchas veces le llevo a una crítica de esa destructiva por los medios.

Y es aquí cuando comenzó a importarme  más en el retrato, pues al principio no me parecía tan interesante, pero conociendo un poco más sobre estas(os)  fotógrafas(os), como Cecil Beaton, que para mi ver, dió un salto grande de Cameron a él, en el sentido de que Beaton era un fotógrafo de la realeza, de la moda y celebridades, con algunos toques “artificiales”, artificiales por que utilizaba en sus retratos otras atmósferas luminosas, más accesorios etc, pero no porque la fotografía fuese artificial sino era “natural” pero con otra visión o sentido.

La fotografía de August Sander, bastante nítida y enfocada, el no elegía a los individuos que retrataría sino suponía “con razón, que la cámara inevitablemente revela los rostros como máscaras sociales”; la luz bien manejada sin ningún efecto. Y claro algo de los retratos de Diane Arbus me sugieren a Sander ,  con una nitidez que resulta un poco mórbida, luces duras , pero sobretodo llama mi atención sus modelos, personajes que nos resultan “distintos” pero con los que tenemos mucha igualdad al mismo tiempo.

Reflexiono entonces sobre el retrato, esa forma de captar ciertas sutilezas que no pueden verse a simple vista, ¡ojo!, no sólo con personas, bien pueden ser edificios como algunos de Berenenice Abott, o instantes y experiencias cotidianas como los retratos de Nan Goldin que reflejan muchos temas que tuvieron que ver con su vida, el juego de la luz de Tournachon o llegar hasta “derrotar anímicamente” a los modelos en largas sesiones para que en determinado tiempo   mostrara su personalidad más sincera, como lo hacía Richard Avedon.


Finalmente pienso que cada quien tiene una forma de ver el retrato, no hay un modelo a seguir, hay muchos, pero cada quien le da el giro que desee, que se identifique ya sea con su personalidad, con  sus experiencias y vida, con algún tema a documentar etc; pero hay factores formales que son necesarios conocerlos, como el enfoque, la luz , claros y oscuros, iluminación, encuadre, nitidez, composición etc, para que si en algún momento deseemos romper con algún aspecto, lo hagamos de manera correcta o quizá no tan correcta.

miércoles, 22 de febrero de 2017




                                                                     ENSAYO

                     SOBRE LA FOTOGRAFÍA DE SUSAN SONTAG



Una frase de Avedon que me trajo consigo cierto desconcierto, “Las fotografías tienen para mí una realidad que la gente no tiene”. Por medio de la fotografía las conozco”. Me puso a reflexionar y pensar, claramente  para mí se refería a que la fotografía de una forma u otra revela, descubre aquello oculto que no se puede notar por si solo y me identifiqué con ello, pues recordé al instante mismo que cuando tengo un momento en el que veo fotografías, puedo notar que el rostro de un asesino puede casi confesar esa “maldad”, o cuando miro una fotografía donde dos muchachas salen y una de ellas mira a la otra de forma envidiosa, cuando alguien oculta su decepción o tristeza con una sonrisa falsa, en fin, una serie de imágenes donde podría identificar esta frase.
Pues la gente solemos tener comportamientos y actitudes que vayan conforme las reglas morales, no muchas veces son tal cual en realidad son, se someten a cirugías para engrandecer su ego, a dietas, se reprimen a callar lo que les afecta, a moldear sus sentimientos, a reducirse para no perder su trabajo, a sonreír ante la guerra y un sinfín de sombras y máscaras que producimos todos los días y la fotografías mucho delatan y evidencian.

Me es interesante saber que la fotografía trae consigo, no solo imágenes de la realidad sino un conocimiento personal y de nuestro exterior, como dice Weston “un modo de desarrollo personal, un medio para descubrirse e identificarse con todas las manifestaciones de las formas básicas: con la naturaleza, la fuente”. Una frase de mucho peso, pues cualquiera pensaría que la fotografía no llevaría a un entendimiento más intrínseco y  a un acercamiento a algo a lo que siempre estaremos interrelacionados y que nos conforma de cierta manera, la naturaleza y nuestra naturaleza. Hablo de nuestra naturaleza, pues cada individuo tiene una naturaleza que lo dicta, algunos más amables, otros sensibles, coléricos etc, que quizá no abramos descubierto o controlado. Y por lo tanto la fotografía nos muestra cierta parte de nuestro interior, lo creo así porque al final de una serie fotográfica que realicé, me pregunté el por qué había tomado tantas fotos a plantas o paisajes, y supe que posiblemente en ese momento no lo realicé tan consciente pero después  comprendí que siempre me ha gustado estar en la naturaleza, lo cual no quiere decir que siempre fotografiaré árboles o plantas,  pero claro el ojo ve lo que quiere  y puede ver, pero siempre guiado por algo que es de nuestro interés o algún estudio o conocimiento que queramos construir.

Y lo que interesa son las fotografías que dicen algo de un modo nuevo, escribe Harry Callahan, no con el propósito de ser diferentes, sino porque el individuo es diferente y el individuo se expresa a sí mismo. Creo que en este aspecto la fotografía se relaciona con la pintura, pues a través de ambas te sensibilizas contigo mismo y con lo que te rodea, construyes cierto conocimiento, puede ser a partir de un concepto, aun así, difieren en otros aspectos, pero no las pelearía sino  complementaria, una con la otra dejando de lado si funcionan como arte o no.

Así mismo la fotografía refleja para muchas personas una realidad que otras artes como la pintura no alcanza a reflejar con tanta “precisión”, pero acaso ¿es la realidad misma representada en una imagen?, Susan Sontag nos dice que el realismo fotográfico puede ser , lo es cada vez más, definido no como lo que “realmente hay” sino como lo que “realmente se percibe”, con lo que estoy de acuerdo, pues a través de un lente podemos percibir una luz, una sombra, observar algo que el ojo no alcanza a ver e incluso  podemos sentir , pero la realidad es esta, la que ya está y existe.

 Pienso que la fotografía nos acerca y nos aleja de esta realidad y en ciertos instantes agrede, nos acerca porque nos deja contemplar, componer, observar colores, texturas acercándonos a algo que posiblemente para nosotros era tan lejano, un lugar, una persona, una cosa; pero al mismo tiempo nos aleja de la realidad porque como dice Henry Peach Robinson, según el cual la fotografía es un arte porque puede mentir y yo le agrego aparentar y hasta transformar la misma realidad , así como puede develar  también puede aparentar, pues en la actualidad, por ejemplo, en la fotografía de moda es bastante usual que se utilicen ciertos cánones de belleza, un ambiente artificial y material, lo cual a mi forma de ver nos aleja de la realidad de muchos, es solo un ejemplo burdo.

En la Esencia de del Cristianismo, Feuerbach señala que “nuestra era” prefiere la imagen a la cosa, la copia al original, la representación a la realidad, la apariencia al ser”, dicho esto , creo que es verdad pero no por culpar a la fotografía sino la forma en que ésta se utiliza y por quién se utiliza, pues en la actualidad las imágenes nos bombardean, y nos provocan diversos sentimentalismos e incluso ansiedades, como el de desear algo que no tengo, tristeza, compasión, indiferencia, nostalgia, recuerdos , pero todo esto de manera  temporal, pues la fotografía se utiliza en diversas disciplinas, que la han utilizado para un “bien” o para un “ mal”. Susan Sontag nos menciona que las cámaras definen la realidad de dos maneras esenciales para el funcionamiento de una sociedad industrial avanzada: como espectáculo (para las masas) y como objeto de vigilancia (para los gobernantes).

Y bueno finalmente considero que la fotografía  es una forma de experimentar con la realidad , de representarla, develarla, transformarla, de manera que cada quien le da su significado o concepto si es el caso y le da la utilidad que desee, ya sea para coleccionarla, documentarla, para tener recuerdos, para causar incomodidades por qué no, para conocerse así mismo o concientizarse, de manera formal, con sentido social, etc; es compleja, tirana y a veces mentirosa pero también es bella, seductora, enigmática y transformadora en el sentido que se quiera tomar.



lunes, 6 de febrero de 2017



       


          VISITA AL LABORATORIO DE INVESTIGACIÓN GRÁFICA


En esta visita conocimos el taller de Luis Ricaurte , quien nos explico junto con su asistente los trabajos que realizaban ahí, los cuales iban desde grabados con máquina láser en madera, en acrílico u otros materiales, que eran técnicas que ya conocía, pero un trabajo que me gustó mucho y me pareció innovador fueron las figuras que diseñaba Luis Ricaurte en un programa donde se podía modificar rápida y flexiblemente en una máquina y conforme a ese archivo se  enviaba a otra máquina donde se configuraba o programaba la máquina para realizar determinada figura con filamento abc, el cual es vegetal y las figuras podrían ser comestibles.

También conocimos como realizaba algunas placas para su grabado en madera y otras técnicas con máquina láser. Fue enriquecedor ya que observé que hay muchísimos materiales y técnicas que se pueden utilizar para experimentar en distintas piezas o trabajos que requiera realizar.